viernes, 9 de agosto de 2013

Un adiós sin ti

Yo era aficionado a su encanto y en su pueblo las mujeres murmuraban y los ancianos preguntaban…
En qué esquina su mirada tierna robaba los corazones frágiles…
Y si habría que preguntarse algo yo te lo preguntaría…
Cómo es la mueca de tu cara en la madrugada frente al frío…De qué color es tu abrazo junto al alba…Dónde descansa tu cabello en esas noches de verano.
Se fue una mañana sin despedirse, sin siquiera conocer el sabor del amor, regaló sus juguetes en glorietas y sus besos no llegaron a madurar.
Yo la miré de lejos y le pedí su amor, sin hablar, en silencio, como la soledad se lo pide al mar.
Construimos historias de papel en un presente disipado, mientras los besos sólo se dieron en futuros escarchados y el pasado quedó en letras que nunca se pudieron escribir.
Sólo nos queda soñar, a mí en ti y a ti en instantes existentes.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario