martes, 26 de febrero de 2013

Mañanas Frescas


Cuando puedas quererme el tiempo cambiará. Las sombras ya no serán sino ecos de pasados consumados, las nostalgias emigrarán hacia lejanos destinos.  
Y Yo…Te regalaré mañanas frescas con azules cielos que descansen en nubes infinitas.
Abrazos cálidos y sinceros como de bebés con pocos meses de nacidos.
Caminos verdes de palmeras inmortales enfiladas hasta el horizonte.
Un canto disonante que amanezca con el sol y una risa afinada dibujada en un atardecer.
Lunas luminosas y noches estrelladas.
Primaveras sin alergias, veranos duraderos, otoños abrazados e inviernos familiares
A cambio recibiré alegrías momentáneas.
Miradas inconclusas que penetren en el alma.  
Perfumes juveniles que transformen el aliento.
Sonrisas contagiosas sencillas de crear.
Menudos cuerpos y despidos al azar.
Y cuando digamos adiós, las nostalgias me encontrarán en alguno destino, pero las mañanas seguirán siendo frescas y el cielo descansará sobre nubes engrosadas. 

1 comentario:

  1. Bien, bien, Alex. Se nota el progreso en la construcción de los versos.

    Felicidades.

    Julieta Ethel

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